Los primeros pobladores habitaron en la
Cueva de las Arañas en el tercer, cuarto milenio a.C. Después
encontramos un poblado íbero amurallado del s. IV a.C.
A partir del siglo I d.C, con la llegada de los romanos, la zona pasó a
denominarse "Portus Illicitanus", siendo uno de los puertos claves del
comercio marítimo. De esta época quedan numerosos restos arqueológicos.
Tras la caída del Imperio Romano y durante la etapa medieval el área
sufre un despoblamiento general, debido en parte a los saqueos de los
piratas. Ello motivó la construcción en el s. XVI del Castillo-Fortaleza
y las Torres Vigía.
A partir del s. XVIII la población se concentra entorno al Castillo,
núcleo del cual parte el desarrollo de la villa. Actualmente, Santa Pola
es un municipio turístico que cuenta con la flota pesquera más
importante del Mediterráneo español.
![Salinas de Santa Pola](images/salinas-santa-pola.jpg)
Santa Pola goza de una temperatura ideal
durante todo el año, lo que hace muy apacible y agradable el baño, ya
que sus aguas son puras, como así lo demuestra la concesión desde 1987
de varias banderas azules. Dichas aguas, incluso son galardonadas con
cinco parasoles por la calidad del agua y la arena, y están certificadas
por Aenor según normas internacionales en Sistemas de Gestión de la
Calidad y Gestión Ambiental: ISO 9001 y 14001. Las situadas al Oeste son
ideales para niños y mayores por la bonanza y poco calado de sus aguas
(El Pinet, Playa Naturista La Gola, Tamarit, Playa Lisa y Gran Playa).
Las del Este están protegidas de los vientos del norte por el Cabo de
Santa Pola, poseen un micro-clima ideal, aguas cristalinas y finas
arenas (Levante, Calas de Santiago Bernabeu, Varadero, Calas de Santa
Pola del Este y Calas de l'Aljub).
Parque Natural de las Salinas: Declarado
como tal en 1986, cuenta con una extensión de 2.946 hectáreas, siendo un
espacio de gran interés paisajístico, faunístico, ambiental y geológico.
Además, cuando todos los factores se unen, se pueden contemplar
atardecer espectaculares. El Museo de la Sal funciona como Centro de
Información del Parque, contando con la posibilidad de realizar visitas
guiadas y un observatorio de aves.
La isla de Tabarca, frente a las costas
del municipio, es la primera reserva marina de España, con aguas
transparentes, y cuenta con una importante flora y fauna. Desde Santa
Pola hay una línea marítima que une el municipio con la isla en un
trayecto de unos 25 minutos.
Otra visita altamente recomendable es la
del arrecife de Santa Pola, ejemplo único en Europa de un arrecife del
Mioceno.
Se pueden concertar visitas guiadas con o sin animación. |